domingo, 15 de febrero de 2009

Los sonrientes cronicos

Tu vida es sencilla
caminas pensando
que te corresponde el cielo
cuando en realidad hay un
ejercito de morbosos
que te han visto bañar
en mi regadera

Tu vida es sencilla,
se compone de tres
o cuatro llantos de madrugada,
un silencio,
una canción que pasa,
y el comedor


Me retracto de todo
lo antes dicho,
no hay mayor amor
que ver por la ventana:

Tu adentro repites
el evangelio temblando
pero nadie te ve

Tu debajo pareces el
mas dulce de los pecados,
pero no tienes corazón
y te desvaneces entre
los nativos que devoran
niños bajo el cráter
de un volcán

Te haces milagro
de la redención, huyendo,
siempre pensando que mañana
amanecerá de día y
no será la noche
la que arrebate tus
cantos, para dejarlos
al amparo de los sin nadie,
de los bastardos,
de los sonrientes crónicos,
de los sin nadie

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